Aún no es navidad, pero hoy sentí un cierto paralelismo con el cuento de Charles Dickens.
Mientras caminaba por el centro de la ciudad y me dirijía a buscar dinero al cajero automático creí divisar varios de mis fantasmas del pasado. Estuve unos minutos analizando la situación y me dí cuenta que tengo al menos tres fantasmas de navidades pasadas. Meditando un rato más se me cruzaron un par de la navidad presente y en el de las navidades futuras, aparezco yo. Solo yo.
Me parece bastante llamativo que en esta fecha me hayan sucedido cuestiones importantes y desdichadas: una nefasta cena navideña en Santiago y una ruptura amorosa...por mencionar algunas.
El que más me preocupa es el que observé en el futuro, porque estaba solo o sola, más precisamente.
Pero no pude observar nada más, cómo era su expresión facial por ejemplo. Si llevaba ropa decente o andrajosa....es decir, además de que aparecía sola, no pude saber si estaría triste o feliz.
Creo que de eso se está tratando un poco esta etapa de mi vida. Porque estoy pensando seriamente que no debo tratar de revertir esta soledad a como dé lugar, sino que tengo que aprender a pasarla lo mejor posible y a lograr que mi fantasma de navidades futuras sonría.
Feliz navidad chicos!